De acuerdo a las ultimas investigaciones de la biología molecular, el ADN no controla su propia replicación, sino las proteínas resultantes de las cargas electromagnéticas surgidas de la percepción del observador.
Lo anterior no hace más que reafirmar lo que la filosofía y la medicina oriental nos han dicho por más de 2 mil años en referencia al impacto que tienen los pensamientos (cargas eléctricas) y las emociones (impulsos electromagnéticos) en nuestro ADN.
La hipótesis del dogma central de la biología convencional se cae a pedazos, ya que no es posible seguir sosteniendo que la información contenida en nuestro ADN controla nuestra vida, ya que lo cierto es que lo que diseña nuestro destino es la interpretación que se efectúa de esa información.
Esto es tan solo un fragmento del espíritu que podrás encontrar en este innovador curso titulado: “La mecánica de las creencias; el proceso de la creación”
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Rodrigo Oyarzun G
Tucoachescritor